“Los clientes me dicen sorprendidos que la mermelada de pimiento ¡sabe a pimiento!”

Productor. OnEin kontserbak.

Responsable: Begoña Villar.

Creación. Mayo de 2015

Ubicación. Hernani (Martindegi 39).

Producto. Conservas vegetales.

  • Verduras: calabacín, calabaza y pisto.
  • Mermeladas: naranja, naranja y calabaza, calabaza y coco, calabacín con limón, melocotón, ciruela con lavanda, fresa, frambuesa y violenta, higo, cerezas, …
  • Productos con Manzana: dulce de manzana (también con nueces), puré de manzana, compota (receta navideña).

Otros datos: Materia prima local, salvo la naranja y el limón, que proceden de Valencia, y el azúcar de caña ecológico que procede de fuera de la UE.

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 ¿Por qué te dedicas a realizar conservas?

Hace 28 años que la abuela de mi marido nos dio permiso para utilizar su huerta e instalamos unos invernaderos allí. Desde entonces hemos trabajado en ellos para consumo propio. Cuando la abuela murió, compramos sus propiedades, que a día de hoy se han convertido también en nuestra vivienda. Siempre hacíamos conservas con el excedente de la huerta y cuando en 2012, como me quedé sin trabajo cerca ya de los 50, decidí que era el momento de dejar la informática, mi profesión, y cambiar de vida. Pero, ¿qué hacer? No fue difícil la elección: elaborar para los demás las conservas que ya hacía para los de casa. Desarrollé mi proyecto durante dos años y el año pasado se convirtió en realidad.

¿Y de dónde surgió la idea de que fueran ecológicas?

Tengo la convicción de que tenemos la responsabilidad de cuidar mejor de la tierra, por ella misma y porque lo que hace que nos movamos, el alimento, tiene que ser sano. El producto ecológico, al contrario del que no lo es, no es dañino ni para la naturaleza ni para las personas.

¿Qué valor aportan los productos ecológicos?

Los alimentos ecológicos son seguros y más sanos, y su producción respeta y cuida nuestra tierra ahora y de cara al futuro. En el caso de las conservas, el sabor tiene mucho que ver con el punto de maduración en la recogida de las hortalizas. Muchos productores recogen la materia prima muy verde para que se mantenga en buen estado más tiempo. Pero si la maduración es natural, el sabor es mejor. Yo, desde luego, prefiero gastarme un poco más de dinero en alimentación que en tener un teléfono móvil de última generación.

¿Cómo es tu día a día para lograr crear sus conservas y mermeladas?

Con mucha dedicación. La jornada empieza a las 8 de la mañana y en verano no termina hasta las diez de la noche. En invierno la jornada es más razonable. Hay que cuidar el cultivo, recogerlo, limpiarlo y trocearlo, cocinar y envasar, pasteurizar o esterilizar. Un lote se debe realizar en el mismo día; no se puede dejar a medias para el día siguiente a fin de garantizar la seguridad alimentaria y no consumir energía en exceso. Confecciono alrededor de 7.000 tarros de conservas de verdura y 10.000 de mermelada al año. Elaboro conservas con mi marca comercial (OnEin kontserbak) y también por encargo para grupos de consumo.

¿Qué tipo de clientes compran tus conservas?

Me centro en los mercados, a los que acudo todos los sábados. Allí el público es, sobre todo, de mediana edad. Eso sí, los niños suelen ser unos grandes aliados, porque les encantan los sabores de las mermeladas, y los padres y abuelos acaban comprándolas. En verano elaboro muchas conservas para algunos grupos de consumo de mis alrededores. Es la época de mayor producción y el excedente se aprovecha, así, para poder repartirlo también en invierno en las cestas. También vendo en algún pequeño comercio y, en cuanto el tiempo me lo permita, voy a trabajar para aumentar los puntos de venta.

¿Qué le dicen en cuanto las prueban?

Me dicen sorprendidos que una mermelada de pimiento… ¡sabe a pimiento! Las conservas y mermeladas de OnEin tienen la fruta o la hortaliza casi por completo. Normalmente, una mermelada del supermercado contiene menos de un 50% de fruta. Mis productos están por encima del 70%.