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“Queremos contribuir a la sociedad y al medio ambiente; crear lazos con los consumidores y agentes del entorno”

Respetar el entorno; garantizar la igualdad y las condiciones de las personas; promover las relaciones comerciales, el consumo y la economía locales… Karabeleko impulsa este tipo de valores, en base al modelo agroecológico. Iker Goikoetxea, técnico de Kimu Bat y gestor de Karabeleko, explica en esta entrevista la filosofía de la finca.   

Entre los objetivos de Karabeleko, la promoción de la agroecología cobra especial relevancia. ¿Cuál es la razón de querer impulsar éste modelo? 

Sí, es uno de los pilares de Karabeleko. Esa es la razón por la que el proyecto se denomina finca agroecológica, por ser un modelo que impulsa criterios que distan de la tradicional agricultura. Al fin y al cabo, tenemos que ser respetuosos con el medio ambiente, coger la medida a la explotación; ya que, a la hora de producir, tenemos que apoyar la igualdad, las condiciones y el valor de las personas o el grupo humano que esté detrás de la producción. Asimismo, la  agroecología, como base de la producción, contribuye a su entorno, a la sociedad, a la población cercana, etc. Además de cuidar la tierra y el paisaje, favorecemos la creación de empleo y la economía local.

Karabeleko busca ser económicamente autosuficiente. ¿Cuáles son los pilares económicos del negocio? 

Los impulsores de Karabeleko teníamos claro que éste debía ser un proyecto que se sostuviera por sí mismo, y que se basara en criterios de cercanía en la comercialización. Por consiguiente, creamos un grupo de consumo y una tienda con productos 100% ecológicos.

El grupo de consumo distribuye 70 cestas, sobre todo entre socios de Agifes: existen puntos de recogida en algunas zonas de Donostia y en la propia finca. En cuanto al grupo de consumo, además de repartir verduras típicas y no tan típicas de propia elaboración entre los participantes, nuestra intención es plantear distintas dinámicas con los consumidores, para fortalecer la relación y acercar la huerta a los ciudadanos.  

Hoy por hoy, aunque nuestro grupo de consumo lo conformen, en su mayor parte, los socios de Agifes, nuestra intención es llegar a un público más amplio.

¿Cuáles son las ventajas de la comercialización de proximidad? 

Para impulsar la agroecología, hay que dirigirse hacia la venta directa, es decir, hacía la comercialización de proximidad. Así, tenemos la posibilidad de mantener una relación directa con el cliente, de conocer la opinión de los trabajadores del lugar o de trabajar junto a personas con dificultades de integración social. Karabeleko pretende, a su vez, influir de forma positiva en su entorno, para poder difundir la forma que tenemos de entender la agricultura e impulsar la colaboración con grupos de personas y asociaciones cercanas: ferias, relaciones directas, etc.

Por otro lado, tener una relación directa con el consumidor facilita la venta inmediata del producto. Además, pretendemos trabajar codo con codo con los agricultores que compartan con nosotros la inquietud por fomentar el cultivo ecológico y que deseen conocer nuestra gama varietal. Por tanto, la agroecología convierte la apartada y dispersada horticultura en algo muy humano y vivo.  

Es cada vez más común poder degustar en los restaurantes productos ecológicos y de la zona. ¿Os habéis planteado algún tipo de colaboración?

En primer lugar, hemos podido comprobar que cada vez existe mayor sensibilidad respecto a los productos locales y ecológicos. Éste es otro de los ámbitos que queremos trabajar. De hecho, estamos entablando conversaciones con diversos cocineros que se han mostrado muy interesados en nuestro producto. En segundo lugar, contamos con una ecotienda para vender productos ecológicos relacionados con la horticultura y la floricultura, tanto a profesionales como a agricultores amateur. Queremos que los  productos ofertados sean 100% ecológicos, y así está siendo, a pesar de las dificultades. En este espacio, situado en la propia finca, pueden encontrarse hortalizas y plantas aromáticas, plantas de pequeños frutos, etc. Y también herramientas, productos y otro tipo de cosas relacionadas con el cultivo. Finalmente, el objetivo de la comercialización es que sea de proximidad, basándonos en los criterios agroecológicos ya mencionados, para poder así fomentar las relaciones directas, la rentabilidad y el menor impacto posible en el medio ambiente. 

¿Cuál es el papel que desempeña Kimu Bat en Karabeleko?  

Kimu Bat trata de impulsar la horticultura; ya que trabajando la horticultura logramos promover la floricultura. Creemos que ambas se complementan. Hay que tener en cuenta que aquí no se ha producido el desarrollo que la floricultura ha tenido en otros lugares, en parte, porque la horticultura ha sustituido esta actividad y no ha mostrado interés en extenderla.

En la última década, se ha dado una notoria falta de sensibilidad hacia la floricultura. En este sentido, hemos visto la necesidad de promover la cultura de la jardinería y el cuidado de las plantas. Sabemos que la horticultura es una forma relativamente fácil de acercar a la gente a la floricultura, por ser una actividad muy arraigada en nuestro entorno. Éste es el objetivo que nos ha llevado a formar parte de Karabeleko. Hoy en día, en nuestra opinión, tenemos que apoyar la horticultura en su máxima expresión, en especial, el modelo que impulsa la biodiversidad; y estamos orgulloso de poder participar en este proyecto.